Con Superman , Ned Beatty entregó el mejor lacayo de las películas de superhéroes




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Antes de que fueran el único tipo de película, las películas de superhéroes eran para niños. Fueron aventuras de capa y espada con partituras conmovedoras y personajes amplios. Eran el Superman de Richard Donner . La primera película de superhéroes, Superman , fue una señal de lo que vendría, una potencia de taquilla que cautivó al público y a la crítica. Y Superman no sería Superman sin Otis, el torpe e incompetente secuaz de Lex Luthor que el difunto actor Ned Beatty apuntó directamente a los niños de la audiencia. Con una comedia física perfecta y una calidez que irradia la pantalla, Beatty convirtió el ingrato papel en algo memorable.

El Otis de Beatty era más amplio que amplio. Se vistió con trajes grises y marrones con vívidos corbatas diminutas y un sombrero de paja que parece que entraría en Metrópolis en el furgón de cola de un tren para anunciar que se postula para alcalde. “March Of The Villains” de John Williams resume a la perfección a Otis, y nos dice todo lo que necesitamos saber sobre el personaje tan pronto como lo vemos. En otras palabras, Otis era un personaje de cómic y Beatty lo interpretó como tal. No tiene sentido de lo que le rodea, no comprende las consecuencias, no tiene inteligencia alguna, solo obediencia perruna a su jefe, el Sr. Luthor (Gene Hackman). Es escuchar música que Beatty dice ese nombre: Sr. Loot-Thor.

Hay una extraña aversión al humor en algunas historias de superhéroes, particularmente en las del universo de DC. Si bien las películas de Marvel generalmente están llenas de bromas, las últimas dos décadas de las películas de DC han sido bastante sombrías , especialmente cuando se trata de Superman . A veces olvidamos que los cómics de superhéroes son divertidos no solo porque hay bromas, sino porque los personajes son ridículos. No hay lógica detrás de algunos de los esquemas de Luthor de los años 60 y 70, planes descabellados (juego de palabras muy intencionado) como subastar los órganos de Superman y robar 40 pasteles . El Superman de Donner respondió inadvertidamente a una de las largas preguntas no formuladas: ¿Quién trabajaría para este tipo? Otis, ese es quien.

Superman no se burla de la inclinación de Luthor por las malas ideas. Su objetivo general en la película es crear un terremoto tan destructivo que hunda a California y le dé a Luthor algunas propiedades inmobiliarias de primera para controlar. Hoy es pasto de las bromas, pero en ese momento, estaba en consonancia con el tipo de villanía de Luthor. Aún así, vender audiencias en esto no sería fácil. Por eso necesitas a Otis. Su devoción por el Sr. Luthor, que Beatty transmite con seriedad, le da a la audiencia una comprensión de quién sería convencido por un narcisista que no puede ver cuán tonto es en realidad. También necesitas que Otis haga el mejor chiste de la película: "Otisburg".


Beatty no tiene miedo de apoyarse en el bufón. Su Otis es un lacayo que come perros calientes y cuya mayor preocupación es mancharse la camisa de mostaza, que se enjugaría con la corbata. Pero los apartes, los malentendidos y las payasadas de Beatty le permiten a Donner acelerar la exposición y llegar al núcleo de los planes de Luthor. Si Otis puede entenderlo, los niños de cinco años de la audiencia también pueden. No es que Beatty le hable a los niños, pero en una época en la que las películas de superhéroes pueden ser lamentablemente complejas, es refrescante ver una película tan preocupada por explicar lo que está en juego a los miembros más jóvenes de la audiencia.

El lacayo supervillano cayó en desgracia casi tan pronto como llegó Otis. En los años transcurridos desde Superman , películas como Batman y X-Men reducirían la escala del papel de secuaz. En cambio, personajes como Toad y Bob the Goon eran infinitamente más amenazadores a través de una amenaza física e inquietante. Con Superman Returns , el director Bryan Singer fue un paso más allá, eligiendo a un actor cómico Kal Penn y sin darle una sola línea (es uno de los castings que más distraen la memoria). Pero Otis hizo algo más: le dio al personaje de la película, martillando en casa, un tono alegre y cómico que no degradó el arte en la pantalla. Elevó a todos al comprometerse con el personaje y jugarlo con alegría.


No hay mucho espacio para alguien tan gloriosamente estúpido como Otis hoy. Pero aún puedes sentir algo de su ADN en las películas de superhéroes que no temen divertirse un poco. Thor: Ragnarok y Guardians Of The Galaxy están llenos de Otises, personajes como Drax y Korg. No es de extrañar que se conviertan en los favoritos de la audiencia. Son los Otis del siglo XXI.

Sin más referencias que los cómics de donde sacar, Beatty se sumerge en el torpe supervillano con aplomo. Sus trajes baratos y su estruendoso barítono le dieron a Superman un toque cómico que hizo que todos a su alrededor se vieran mejor. Hizo que Hackman pareciera más amenazador, hizo que Superman (Christopher Reeve) pareciera más poderoso e hizo que el mundo de la película fuera más realzado, más parecido al cómic que abre la película. Beatty dio decenas de grandes actuaciones en su vida. Pero para aquellos que crecieron en Superman , él siempre sería Otis, y lo amamos por eso.


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